Las armaduras se ponen de moda. Viejos yelmos con piezas doradas, corazas griegas del siglo VI a.C. Puedes verlos en las salas de espera de los aeropuertos, sosteniendo sus maletines mientras acarician las empuñaduras de sus espadas. Hombres de negocios que utilizan el enorme poder simbólico de la imagen del guerrero para representar a sus empresas. Corporaciones que visten a sus delegados con hombreras y guanteletes, con guardabrazos y cota de malla. Magnates de la construcción que destinan cantidades de seis cifras para hacerse con una brigantina española del siglo XV. Un atardecer apocalíptico a través de los cristales de una sala de reuniones en Bruselas. La presentación en Power Point llevada a cabo por un director ejecutivo que viste una armadura de la milicia romana.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
8 comentarios:
Incluso iría más lejos y me atrevería a decir que los ejecutivos neoliberales de las grandes empresas llevan la ALMADURA, ¿comprendes? ALMA-DURA, por su falta de escrúpulos.
Me gusta que te enfrentes al sistema. ¡Duro con ellos!, que son pocos y cobardes.
¿Y ese primer café de 2010? Ese café del futuro. ¡Fo-fo-fóllate a un burro!
http://www.youtube.com/watch?v=_9gfyJa5Toc
Que jodida delicia visual por favor....
Y Agatha Ruiz de la Prada? Qué armadura viste la susodicha?
Jajajaja, por favor, que te den el Oscar ya por ese twitter que tienes. Lo del lobo es antológico.
lo viejo siempre vuelve. armadura old school
De lejos el mejor twitter de la red... épico.. gracias hongos
Publicar un comentario