viernes, 18 de diciembre de 2009

APLAUSOS

Subes al vagón de metro y los pasajeros comienzan a aplaudirte. Gente sentada con el periódico doblado sobre sus rodillas. Un niño con impermeable amarillo y expresión cansada. Dos señoras mayores que sonríen cálidamente mientras asienten con la cabeza. Todo el mundo aplaudiendo de ese modo pausado y teatral que elimina cualquier sospecha de ironía. La joven universitaria con una diadema en la cabeza. El nigeriano que sostiene un racimo de bolsos falsificados entre sus piernas. Esa forma de aplaudir que obliga a los actores a salir una y otra vez a saludar al público desde el escenario. Subes al vagón de metro y eres agasajado con una ovación opresiva que te obliga a bajarte en la siguiente parada.

5 comentarios:

Miguel Noguera dijo...

Pues yo pensaría que se trata de una broma de cámara oculta he he he. ESTROPEAR LA MAGIA DE ESTA ACTUALIZACIÓN.

Hongos dijo...

Jajajaja. Noguera, ladrón de magia.

Anónimo dijo...

Y devolver la aplausada al contingente del vagón en pro de una mayor singularidad?

(me ha gustado tu escena, mi ovación va para ti)

El Andariego dijo...

tu enorme parecido con Massimo Tartaglia.
V.P:sessedos

Unknown dijo...

www.noguisheladróndemagia.net