viernes, 20 de julio de 2012

EL DIRECTOR


Cuando los protagonistas de la comedia romántica (profesor universitario divorciado y viuda sexy) deciden finalmente sucumbir a los placeres de la carne, el director decide que la cámara aparte lentamente la mirada. El clásico y manido recurso que, acompañado por un fondo musical meloso, desemboca en un plano fijo a una ventana o a la chimenea encendida frente a la alfombra del salón. Sugerir en vez de mostrar. Las manos del amante que se afanan en desabotonar la blusa. El cabello recogido de la chica desordenado a base de caricias. El traveling que nos toma de la mano para invitarnos a dejarles un poco de intimidad justo cuando ella se afloja el sujetador y estamos a punto de ver un poco de teta. Porque todos somos adultos y sabemos perfectamente a qué se dedica la pareja mientras el director decide mostrarnos los pies desnudos de los amantes, la mesita con tapete de ganchillo donde reposa el teléfono, las cortinas filtrando luz de luna, la penumbra, un culturista negro y desnudo que, sentado sobre el suelo en un rincón de la estancia, se taja el glande con una cuchilla de afeitar justo en el momento en el que eyacula.     

6 comentarios:

tiramisú dijo...

No está nada mal.

Anónimo dijo...

Cada ves hilas más fino.

Don_Mingo dijo...

Acabas de provocar otra corrida.
Bravo! (alguien entre el público se levanta en mitad de la película y aplaude)

Gary dijo...

Hola, quiero leer QUÁSAR, ¿es posible? Ya no funcionan los enlaces antiguos. Si no me respondes, insistiré. Quiero leer QUÁSAR.

Hongos dijo...

Ey, Gary. Envíame un mail a galgotibio@hotmail.com y te lo paso a tu dirección en .pdf

El Andariego dijo...

HONGOS HA DECIDIDO REGRESAR EN UN VERANO TÓRRIDO. SUBEN LOS TERMÓMETROS.